jueves, 24 de mayo de 2012

El último vuelo.


De entre las monótonas presencias emergiste, tal loto de turbias aguas.
Inexplicable aconteció uniendo un fragmento de ti conmigo, la esencia de un hilo blanco conectó nuestros vivaces impulsos.




Eternos delirios compartimos en la cúspide inalcanzable, donde  miradas no ven ni recuerdan mentes. Vestidos de poesía, yaciendo sobre nubes... bajo cielo de tragedia. Obtuvimos de la confianza el permiso y de la esperanza la bendición... solo para perderlas.


¡Oh, Duende de las Ilusiones, interpretaste para mí tu última copla!

Corona de mi aparición tu destello esmeralda fue, así la magia del último suspiro del día cuando cae derrotado frente a la noche; mi espera fue mortal.
... Perdóname... 

¡Cómo desearía estrechar tu disculpa!
Extraviar la razón mientras danzo bajo tu hechizo; perseguir tu aroma embriagante de madre selva; seguir incondicional tu lánguida estela; ligarme a tu existir para morir en tu piel y consumirnos juntos.



No era el sendero, solo un paradisíaco descanso para desviar.
Apartado por el destino, la Inevitable reclamó tu alma desde los fuegos.

La parte de mí que desde suave manto observa, lo vio. Pues no fue bajar de nuestra seda resolución sino consecuencia de la promesa.
Recién entiendo. Tras amarnos...



...no estabas volando... sino cayendo.





domingo, 20 de mayo de 2012



Carece de capacidad para sentirlo, la abandonó en la lejanía.
Le es inefable... ¿cómo narrar lo impersivible?
Increable, posee desconocido origen en el alma ... también ausente.


¿Cómo vivir la felicidad de algo vedado?
Tras el intento de mantener el equilibrio, lo prohibe el cosmos.


Luz y oscuridad.
Tristeza y felicidad.
Principio y...


Todo regresa en una rueda infinita,
igualándose a lo lejos.

Indiferente a nosotros sin más.



jueves, 17 de mayo de 2012



No puede hurtarme aquel sentimiento.
Reside en una memoria sepia pero arde en color.
Lo mantendré vivo para restablecerme, como fuente de energía,
tal dulce recuerdo.

Pero...
No intente contaminarlo,
le he enviado al exilio con justicia.
Si lo pretendiera...




martes, 1 de mayo de 2012

Respirar...



...un campo árido, una tierra seca, extinguiéndose el gemir de los restos bajo la superficie.
Un viento helado inhibiendo el pensamiento. Desangran recuerdos en las lágrimas.
Rinde ofrenda el ocaso consumado a la realidad, humillado, exibiendo oscura piel virgen sin manto nacarado.




Es momento de concluir.


Vuelvo a percibir los volutados bajo mis pies; las cortinas de mis ojos desenrredándose; entumecidos dedos liberan la pluma junto a las hojas; la serenidad con la que el pecho asciende y desciende tras cada tibia exalación...
Había olvidado la sensación de respirar.

 

El último punto del libro refleja en mis ojos sin equiparar la densa profundidad del portal que en ellos también desemboca.

¿Cuántas veces volqué sobre sí esta tapa? ¿Cuán pesada resultaste? Hoy vuelves a la posición correcta, a la primera y última.
Bellísimo título, tarde para mi existencia llegará el día en que no sonría al verte. Perdona si la emoción tornó difusa perdida letra; ignora cada trazo débil que no alcanza tu grandeza; excúsame por cada mancha sangrienta marcada en ti.

Permíteme depositarte en lugar seguro donde logres reposar; y cede escritorio, vela, pluma y autor a un nuevo libro; un nuevo título que ya a la espera se halla.


Llegó el ocaso de tu fantasía, junto con el tuyo.